La elección de la madera como material es muy común por su estética. Siendo un material de fácil manejo y transformación, además de sus buenas propiedades mecánicas; aunque tiene su pero, de sufrir en ciertas condiciones, el caso de estar en exterior, aunque con el tratamiento adecuado la madera se convierte en un material muy duradero.
La madera de Pino respecto a otras especies es de las que mejor acepta el tratamiento de durabilidad para la madera.
Facilidad para tratamientos
Cualquier madera sin el tratamiento adecuado, es muy fácil que le ataquen los insectos o se pudra. Algunas especies de maderas tropicales tienen una durabilidad aceptable al natural, pero por sus precios y por su complejidad en la manejabilidad (peso,dureza…) no son tan buena elección.
Otras especies pueden funcionar tipo el abeto, pero la aceptación de tratamientos no es muy buena, no deja impregnarse correctamente los tratamientos.
El pino combina las características para estos tratamientos, por ser impregnable y de retención para los tratamientos.
Recurso abundante
Los pinares de Europa se gestionan de forma controlada para cubrir la demanda sin arriesgar la especie.
A lo largo del continente americano contamos con grandes extensiones de pinares y de sus diferentes especies, lo que da una gran abundancia de esta especie.
Buena resistencia mecánica
Las características a tener en cuenta son densidad, contracción o flexión, el pino no destaca en ninguna de ellas, pero en la suma de todas es la más equilibrada y da la mejor combinación.
Facilidad en la transformación y en el proceso
Es una madera con fibras rectas, semi-dura, lo que nos ayuda para hacer chapados, es semi-pesada, todas estas cualidades nos facilitan su mecanizado en todos los aspectos (cepillado, torneado, routereado, taladrado, etc.). Es apta para pegamentos, se puede clavar y atornillar con facilidad, también se facilita su unión con piezas metálicas y el color claro de la madera nos permite gran posibilidad para pinturas y barnices.